Texto y entrevista: Zazil Dorado
El señor Delfino Cuaya, nació en Tlaxcalancingo en el barrio de San Diego, en 1958, y desde hace 30 años elabora trompos, baleros y flautas de madera, además de otros juguetes tradicionales. Se nombra como “artesano profesional de baleros y trompos, al rescate de lo que se está perdiendo”; ha sido invitado a ferias como la de Cholula, la de Puebla, y en otros estados del país para exponer su trabajo.
Su gusto por la hechura de estos juguetes empezó a los 20 años, aunque recuerda que en su niñez comenzó a jugar con ellos, cuando su mamá le llevó un trompo y aprendió a jugarlo de ahí, empezó a hacer unos pequeños y otros más grandes. Sentado en el patio de su casa, donde además tiene su taller, nos platica de la materia prima con la que hace los juguetes, “selecciono la madera como el huizache, el tejocote, el criollo, cuando se recoje la cosecha y el árbol ya está viejo se tira, pero yo le doy vida, haciendo trompos de diferentes tamaños”, aunque aclara que cuando utiliza cedro o caoba no la pinta para conservar la elegancia de la madera.
Recientemente el uso de estos juguetes se considera importante para la rehabilitación de personas con alguna discapacidad, incluso lo han llamado a centros de rehabilitación para este mismo fin, además de servir para estimular la destreza e imaginación de cualquier persona. Curiosamente el señor Delfino hace estos juguetes en los tamaños acostumbrados, pero también los puede hacer muy pequeños o gigantes.
Una de las grandes dificultades a las que se ha enfrentado en los últimos meses es la poca venta, ya que acostumbraba a instalarse en el corredor turístico, el cual se encuentra cerrado en estos momentos. Por esta situación el señor Delfino Cuaya hace la invitación para que se comuniquen con él, ya sea para comprar los juguetes que elabora, o para aprender a hacerlos.
Para adquirir o aprender a hacer juguetes tradicionales, se pueden comunicar con el señor Delfino Cuaya, su teléfono es 221 593 9225