“Desde nuestras trincheras y desde nuestras posibilidades, no duden que ustedes pueden unirse o desde sus trincheras, también, contribuir a germinar semillas de conciencia” son las palabras de Daniela Ascencio, parte del Colectivo Proyecto Malintzi San Pablo del Monte, que busca concientizar y sumar esfuerzos para detener la deforestación en la montaña Malinche, en el valle Puebla-Tlaxcala.
Imagen: Proyecto Malintzi – Facebook
De acuerdo con sus integrantes, el Proyecto Malintzi nació a raíz de la inquietud de un equipo multidisciplinario de jóvenes por la pérdida de los árboles en las faldas de este volcán sísmicamente activo, en un contexto de cambio climático. Identificaron que la causa inmediata era la sobrepoblación del escarabajo descortezador (Dendroctonus mexicanus); sin embargo, aclaran que sólo representan un problema cuando aumenta la debilidad de los árboles. Por lo tanto, indican, debemos atender a las causas del debilitamiento: extracción ilegal del suelo, contaminación del suelo, incendios forestales, ganadería y expansión de la mancha urbana e industrial.
De acuerdo con investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (da click aquí para ver el estudio), los cambios de uso de suelo acelerados en esta región amenazan gravemente el equilibrio ecológico de todo el valle Puebla-Tlaxcala. La historia de la expansión ha sido propiciada por el gobierno a través de expropiaciones orientadas al avance industrial y políticas de vivienda injustas. Sin embargo, el mismo estudio reconoce que la zona en la que se asienta San Pablo del Monte es parte de los nodos periféricos que resisten esa urbanización y que crean alternativas de conservación indispensables para todo el valle.
Trabajar para cuidar a la Malintzi o Matlalcuéyetl crea y mantiene un sentido de responsabilidad y de pertenencia, de identidad. Así lo creen Andrea de la Luz y Ramón Cortés, quienes han construido un hogar en un lugar distinto al que les vio nacer. Ahora también sienten arraigo a San Pablo del Monte, a través de la recolección de semillas, del trabajo en el vivero donde crecen plantas nativas, de hacer la composta orgánica que las alimenta, de hacer jornadas de siembra y de planear los cuidados que darán a esos árboles de especies nativas en los años por venir.
“Estos proyectos nos dan la identidad que nos falta para proteger los bosques” dice Andrea. Y no sólo habla de San Pablo del Monte, sino de todas las comunidades de los volcanes que desde tiempo inmemorial han sido cobijadas y regadas por las montañas que nos rodean. Por eso están en comunicación y colaboración con otras organizaciones dentro y fuera de San Pablo. Han hecho acuerdos con verdulerías o panteones para conseguir insumos que transforman desechos en abono orgánico, a la vez que están en comunicación con la Red Matlalcueye-Malintzi, el comité de vigilancia de los bosques de San Pedro Tlalcuapan o los colectivos de Canoa. Ramón finaliza “la organización de las comunidades lleva años; son organización de la comunidad, principalmente jóvenes”.
Fuente: Proyecto Malintzi – Facebook
El Colectivo nos invita al Foro “Éste es mi hogar: Diversidad biológica en la Malinche” este 27 y 28 de agosto en la Casa de la Cultura de San Pablo del Monte. En el foro habrá exposiciones fotográficas, café con ciencia y exhibición de animales vivos. Más información se puede encontrar a través de la redes sociales del colectivo en Facebook y en Instagram.
Fuente: Proyecto Malintzi – Facebook
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