“Continuaremos con acciones concretas en nuestros territorios, promoviendo la autogestión, la autodeterminación y la autonomía, poniendo al centro la vida. También continuaremos sembrando agua y vida con nuestra organización dentro y fuera de los pueblos, fortaleciendo y haciendo crecer los caminos que nos conectan”. Estas son palabras de la Declaratoria de la Primera Asamblea Nacional por el Agua y la Vida, celebrada los días 27 y 28 de agosto de 2022, en la comunidad de Santa María Zacatepec, Juan C. Bonilla, Puebla.
La Asamblea fue convocada por Las Guardianas y Guardianes del Río Metlapanapa, Pueblos Unidos de la Región Cholulteca y el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua, Morelos-Puebla-Tlaxcala. “Somos afectados por todos los gobiernos de todos los niveles, por el capitalismo que quieren saquear nuestra tierra, nuestra agua y nuestro ambiente, nuestro territorio; no lo vamos a permitir a pesar de la criminalización y persecución” fueron las palabras de una integrante de Pueblos Unidos para dar la bienvenida a más de 150 personas procedentes de 15 estados de la República Mexicana, así como personas del Estado Español, República Checa, Estados Unidos y Alemania.
“Nos da mucha fuerza es la espiritualidad que nos dejaron nuestros antepasados; el agua toca, el agua canta, el agua baila. Las piedras y los animales nos avisan que ya viene el agua, nos enseñaron los abuelos, pero estamos perdiendo la vida” recordó Miguel Sánchez, miembro de los Pueblos Totonacos de la Sierra Norte de Puebla. Su presentación fue seguida por periodistas, académicas e integrantes de organizaciones no gubernamentales, quienes hablaron de la multidimensionalidad del despojo y de la contaminación del agua, así como de herramientas de defensa. También hubo presentaciones desde el mundo del arte, con música de Hijos del Maíz, Francisco Barrios “El Mastuerzo”, rap de lucha de un miembro de la comunidad Otomí, así como danza de Argelia Guerrero.
En las mesas de trabajo, se enfatizó la necesidad de recuperar la gestión comunitaria del agua y de crear lo que llamaron “un megaproyecto de vida basado en la ley de los pueblos”. Esta visión del agua es una que no sea sobre la mercancía, sino que atienda a la relación social y cultural que los pueblos indígenas tienen con y a través del agua, que garantice la continuidad de la vida de los pueblos actualmente y hacia las generaciones futuras. Esta visión se contrapone a la visión extractivista que promueve el gobierno y beneficia, de acuerdo con el decir de la Asamblea, a la industrialización con textileras, mineras, refresqueras, cerveceras, mineras, gaseras; industrialización que ha traído contaminación, persecución, enfermedad y muerte a los pueblos.
La Asamblea continuará de manera permanente, con acciones locales y directas para la defensa del agua, además de reuniones periódicas. En sus siguientes acciones, acompañarán las concentraciones convocadas contra la minería en Ixtacamaxtitlán, Puebla, el 18 de septiembre y el segundo aniversario de la Casa de los Pueblos “Samir Flores Soberanes” en la CDMX. La segunda reunión de la Asamblea será el 18 y 19 de septiembre en Santiago Mexquititlán, Querétaro. Finalizaron con un llamado a otros pueblos y colectivos a sumarse a la lucha por la vida. “Nuestros antepasados nos dejaron el agua y la debemos venerar, respetar y dejar libre para nosotras, nosotros, los pueblos… porque agua somos” señaló una de Las Guardianas del Río Metlapanapa.
En este enlace puedes encontrar la declaración completa de la Asamblea.
